Ir al contenido principal

¿Hacia dónde camina Rotring?

Cuando se repasan los catálogos de ciertas marcas no puede evitarse pensar en cuál es el objetivo del fabricante, qué pretende el fabricante con sus productos, a qué público quiere dirigirse. Incluso, podría irse un paso más adelante y preguntarse por qué una determinada marca apuesta por "la estética de lo feo", como parecen indicar los modelos Core y Skynn del fabricante alemán.









Esa apuesta parece ser la de Rotring desde hace ya algunos años, aunque la marca prefiere hablar de vanguardismo, ergonomía, diseño juvenil y otras zarandajas. Otras marcas como Lamy o Tombow también se decantaron en su momento por el espíritu contemporáneo y abandonaron el clasicismo en el diseño de sus piezas sin llegar por eso a los extremos de Rotring. Lo cierto es que el fabricante alemán no parece demasiado interesado en el mercado de la estilográfica "convencional", como lo demuestra la propia historia de la marca, hecho que parece haber aumentado desde que entró a formar parte del gran grupo empresarial Sanford, propietario también de marcas como Papermate, Parker o Waterman, que cubren diferentes perfiles de potenciales compradores.



Algunas referencias históricas.



En 1928 fundó Wilhelm Riepe una empresa en Hamburgo con la intención de dedicarse a la fabricación de instrumentos de escritura técnica, principalmente. Las primeras piezas fabricadas por la compañía ofrecían un plumín que se apartaba del convencional; me refiero al clásico modelo Inkograph o Tintenkuli, pieza que, aparte del diminuto tubito por el que fluía la tinta, presentaba apariencias acordes con lo que otros fabricantes lanzaban al mercado, incluyendo, por supuesto, la fabricación en celuloide nacarado, y sistemas de carga por palanca en los primeros modelos y, posteriormente, émbolo.







El emblema de la empresa fundada por Riepe era un anillo de color rojo -Rot Ring, en alemán- en el culote de la pieza y por esa denominación fue muy pronto conocida la marca, motivo por el cual la empresa cambió su nombre -GmbH de Tintenkuli Handels- por el de Rotring en torno a 1950.



Como ya hemos dicho, las principales aportaciones de la marca alemana han estado unidas a la escritura técnica: primeros rollerball, el Rapidograph en 1953, portaminas, etcétera. Sin embargo, Esta especial orientación no fue impedimento para que la marca lanzara
con simultaneidad a sus afamados Tintenkuli piezas de escritura
convencional en la línea de las estilográficas alemanas más clásicas,
con predominio del color negro, los materiales plásticos y el clásico
sistema de carga por émbolo o pistón.







Algunos modelos actuales.



Initial







Newton







Esprit







Freeway







Core







Skynn







¿Y el futuro?



Me da la impresión que desde la adquisición de Rotring por Sanford en 1998 el final de la marca alemana se encuentra muy limitado. En 2005, Sanford decidió dejar de exportar sus productos a Estados Unidos, reduciendo su distribución a Europa. Por el momento, en nuestras papelerías no faltan estilográficas Rotring, aunque las piezas que fabrica en la actualidad, personalmente, no creo que resulten demasiado atractivas ni por diseño ni por la calidad de los materiales, si exceptuamos el modelo Initial. El potencial usuario de las plumas Rotring es, hoy, un público joven que se inicia en el uso de la escritura con estilográfica y que busca una pieza resistente, de buena escritura y precio asequible.



Más información.-





Technorati Tags: , , , , , , ,

Comentarios

Anónimo ha dicho que…
A ver, tienes razón. Dado que Rotring forma parte de Sanford, creo que han dedicado esta marca a las innovaciones futuristas y a una escritura digamos "técnica", dejando el mercado tradicional y las grandes estilográficas de diseño más clásico a Waterman y Parker. Y sí, son mucho más baratos sus instrumentos.
Tengo varios amigos que realizan trabajos de los denominados "técnicos" (ingenieros, arquitectos, etc) que desde que estábamos en el instituto han sentido debilidad por Rotring a esos niveles. Pero no por sus estilográficas.
En lo que se refiere a mi gusto, he de decir que no me gusta nada Rotring por varias razones, una la has expuesto tú ya. Aunque tengo que reconocer que me regalaron una Esprit telescópica y su plumín de acero va muy bien, pero no es nada cómoda a la hora de abrirla y cerrarla. Lo que la hace atractiva es precisamente lo que la convierte en incómoda.
Anónimo ha dicho que…
En principio parece que Rotring, por su línea de productos se dirige al público más joven. Supongo que la dirección de Sanford le habrá adjudicado ese papel a saber por que razones, quizá por que muchos en la juventud, al hacer nuestros primeros pinitos en dibujo técnico usamos Rotring, pero las decisiones de las grandes empresas se me escapan :)
Sin embargo, como señalas el conseguir un comprador joven, tampoco se logra con plumas de colores y estéticas tan exageradas y estoy de acuerdo contigo en que probablemente Lamy (con las versiones de Safari por ejemplo) pueda tener más éxito.
Aún a riesgo de sufrir el abucheo general dire que las Core no me parecen feas, ni creo que la marca busque una estética de lo feo, pero sí de lo llamativo. Cuando vi las primeras Core me sorprendieron pero no desagradaron. Y no me parece un mal paso para acercarse a aquellos que buscan una pluma por primera vez. Según parece las Core están inspiradas en las zapatillas deportivas y actualmente ya no se producen.
La pluma de Rotring que sí me llamaba la atención y me gustaba es la Newton, en especial el modelo anterior, hexagonal, largo y delgado. El actual modelo de Newton sigue siendo la pluma que más me gusta de su catalogo, pero se ha convertido en una tentación menor.
Anónimo ha dicho que…
Hola, soy Paxaro Azul, bueno, yo también creo que Rotring en algunos modelos se ha pasado un poco de frenada, un ejemplo es el "restyling" de la Newton, con la inclusión de más piezas de plástico y un reborde por donde se agarra que molesta en el dedo, aparte del sistema de cierre y el del anclaje del capuchón, en el que yo prefería el antiguo aparte de una pintura que parece más frágil.

Una pluma que me encantaba de Rotring era la Renaissance, pero debió ser una pluma que no se vendió mucho, y que paso sin pena ni gloria.
Anónimo ha dicho que…
Oye cabloco, no se porque no encontraba tu archivo de fotos de estilograficas. Al final en un post tuyo anterior lo logro localizar pero me dice que no lo encuentra... gracias xDDD
JMGS ha dicho que…
Es que quité el enlace de la barra lateral porque ya había demasiadas cosas, pero puedes encontrar el álbum en el mismo sitio. Te dejo el enlace:

Las plumas del Caboclo
Anónimo ha dicho que…
Buena reflexión, sin embargo he buscado el final de la historia, que aparece en esta página
http://mundodelaestilografica.blogspot.com

Si es que se veía venir.
Te comento que Parker actualmente esta haciendo muchos modelos de Rotring (cambiando un poco los detalles y ahora se llaman Executive, Facet, Esprit)
miralso en nuestra web
www.watchescomplements.com.ar
La idea es que puedan salir mas baratos que lo que salian antes y directamente Rotring deja de fabricar sus productos

Entradas populares de este blog

El plumífero viajero: Milán

El plumífero viajero que aterriza en Italia se encuentra de golpe con un universo estilográfico que no podía imaginar, sobre todo, como es mi caso, si procede de una periferia española en la que hay de malvivir de la oferta de apenas dos honrados pero limitados comercios y de los vientos que soplen por ese monstruo que es El Corte Inglés. Son numerosísimas las marcas italianas que siguen apostando por la estilográfica, y no sólo como objeto de uso distintivo, sino como lo que es: un instrumento de escritura. Esta idea cuesta trabajo creerla hasta que se pasea por las ciudades italianas, ya que lo que a España suele llegar de la pluma transalpina es la deslumbrante pieza que pocas personas se atreverán a llevar a diario en el bolsillo. Cuando se entra en una papelería italiana se comprende rápidamente que alguien nos ha estado engañando: hay plumas Delta o Aurora desde 30 Euros, hay otras marcas prácticamente desconocidas en nuestro país que con precios muy correctos no renuncian a esa

Soñar con una estilográfica

Anoche tuve un sueño (Martin Luther King) Pues sí, anoche, mientras dormía, por primera vez soñé con una estilográfica. No creáis que se trataba de un modelo de esos impresionantes, carísimos y lujosísimos; se trata de una pieza humilde, aunque de las que se escapan de la humildad por arriba. Anoche soñé con la Tombow Lucca . ¿Querrá decir este sueño que debo acercarme a mi camello habitual para adquirir la pieza en cuestión? Se trata de una estilográfica que no he tenido el gusto de conocer "al natural". Solamente la he visto de pasada en el Anuario de Estilográficas de este año y sobre el papel no parece el tipo de pluma que levanta mis pasiones. Sin embargo, creo que últimamente me va cambiando el gusto, de manera que el diseño contemporáneo va ganando poco a poco un lugar en mi corazoncito, siempre y cuando los excesos vanguardistas no alcancen altas cotas de exageración. En fin, como no sé casi nada de la Lucca de Tombow al margen del material con que está construida (a

Estilográficas alemanas

En esto de las plumas uno se deja llevar por sus manías, como en casi todo en la vida. Yo tengo cierta fijación por las estilográficas alemanas y por eso, os dejo un listado de marcas por si tenéis algo que añadir, que comentar, sugerir o lo que sea: Kaweco. La primera en el tiempo. Yo tengo un par: una Sport de alumnio, reciente, y una DIA de los años 40. Geha. Osmia. Marca que después se transformó en Faber-Castell. Faber-Castell. Maravillosas. Tengo una Progress del 56 con capuchón dorado y una eMotion actual de cuerpo de madera de cerezo. Montblanc. No se puede decir casi nada. Tengo un par de 221 y una 224 muy hermosa, con capuchón dorado. Reform. Creo que se trata de una marca austriaca nacida a finales de los 50. No sé si sigue existiendo en la actualidad. Pelikan. Los Reyes Magos me dejaron al pasar una M 215 hermosísima. Soennecken. Un clásico. Rotring. Waldmann. Elysée. Wende. Una marca que construyó en los años 50 modelos inspirados en las Pelikan. Tengo la suerte