Siempre me ha gustado escribir, pero el placer de la escritura se multiplica cuando lo hago empuñando una estilográfica. No me importa que se trate de gama alta o baja, sino el simple hecho de arrastrar la hoja de metal por el papel y dejar un rastro de tinta oscura sobre el blanco inmaculado.
Durante muchos años he prescindido de la experiencia dejándome llevar por la fucionalidad del bolígrafo o del roller o del procesador de texto que tanto facilita el escribir y el corregir; sin embargo, hace no demasiado tiempo, he recuperado el hábito de escribir a mano. Me sumergí en los cajones de casa y recuperé piezas que dormían el sueño de los justos en espera de mejores tiempos. Ahí estaban, esperando pacientemente a que volviera a ellas, sin recriminarme la tardanza, sin un mal gesto que me hiciera sentir culpable de haberlas enterrado en el olvido.
Ahora vuelvo a escribir a mano, vuelvo a llenar los depósitos, a limpiar con mimo las plumillas, a contemplar los objetos pacientes que esperan ser usados por turnos como si de las esposas del califa se tratase. Ahora escribo de nuevo con mis estilográficas de siempre.
Durante muchos años he prescindido de la experiencia dejándome llevar por la fucionalidad del bolígrafo o del roller o del procesador de texto que tanto facilita el escribir y el corregir; sin embargo, hace no demasiado tiempo, he recuperado el hábito de escribir a mano. Me sumergí en los cajones de casa y recuperé piezas que dormían el sueño de los justos en espera de mejores tiempos. Ahí estaban, esperando pacientemente a que volviera a ellas, sin recriminarme la tardanza, sin un mal gesto que me hiciera sentir culpable de haberlas enterrado en el olvido.
Ahora vuelvo a escribir a mano, vuelvo a llenar los depósitos, a limpiar con mimo las plumillas, a contemplar los objetos pacientes que esperan ser usados por turnos como si de las esposas del califa se tratase. Ahora escribo de nuevo con mis estilográficas de siempre.
Comentarios
me gustaria poder disfrutar de la escritura a mano como lo disfrutas tu, lamentablemente tengo mal pulso y mi letra es pesima a pesar de haber hecho caligrafias desde que tengo memoria.
quede encantado luego de leerte y recorde mis tiempos de infancia, cuando queria escribir como el resto. ahora, luego de años de intentar me doy cuenta de que me es fisicamente imposible trazar con pulcritud sobre el "blanco inmaculado", de lo contrario hasta en el computador escribiria a mano.
saludos
Besos Gélidos